"Biblioteca Popular Florentino Ameghino, una olla popular libresca para atenuar la hambruna cultural que nos aqueja"

Dante Balestro

viernes, 17 de octubre de 2014

Lectura emotiva, en donde se puede apreciar la sensibilidad, ya no de un escritor sino más bien, la de un padre desgarrado por el dolor.





Estos bellos relatos con animales, nacieron para ser contados a su pequeña hija Josephine en su lecho de enferma. La niña murió a los siete años. Su padre, Rudyard Kipling,
ordenó en la introducción original del libro que deberían ser narrados siempre "exactamente así, para que ella no despierte". Al traducir esta obra, estamos desobedeciendo su mandato. Quizá el íntimo deseo de Kipling haya sido que desconsideremos su consigna y que logremos despertar a su hija.
Despertar niños, en definitiva, es la función de la literatura.
.

No hay comentarios:

Publicar un comentario